Dentro del sector del deporte, existe una cierta consideración en torno al vínculo de sexo y el deporte, que se ha repetido durante tantos años que ya incluso se considera como una verdad irrefutable, en cuanto a que no se pueden combinar, al menos en el corto plazo. El coito tiene grandes beneficios como se ve en mrpornogratis.it/brazzers/.
En ese orden de ideas, los atletas y deportistas en distintos niveles de exigencia, en la mayoría de los casos suelen evitar que antes de una actividad deportiva se mantenga relaciones sexuales, porque se considera un factor que va a repercutir en la disminución del nivel deportivo.
Sexo y deporte sin que te sientas mal
En principio puede parecer que se trata de una discusión bastante moderna, pero en la antigüedad también se pensaba en esta relación, como anotó el filósofo griego Platón al sostener en el 444 a.C que “los competidores olímpicos antes de las carreras deben evitar la intimidad sexual”. Unos cuantos años después, en el 77 d.C, Pilinio el Viejo como escritor, naturalista y militar escribió que “cuando los atletas están faltos de energía, hacer el amor puede revitalizarlos”.
Ahora bien, en los tiempos actuales se ha identificado que el mayor temor de los atletas y de muchos deportistas, es que el sexo antes del ejercicio fiscal rendimiento, pensando en que esta es una actividad con la que se disminuye el nivel de testosterona, nubla la mente o dificulta que se obtengan resultados.
¿Qué dice la ciencia sobre el sexo y el rendimiento deportivo?
Una de las particularidades de esta discusión, es que las investigaciones aunque muestran resultados diversos, a grandes rasgos se ha concluido que los niveles de testosterona aumentan como consecuencia de los estímulos sexuales. En ese sentido, el atleta se beneficia de la exposición a una relación sexual antes del entrenamiento porque dispone de más testosterona.
De todos modos, el inconveniente para los más conocedores quizá no se da en un nivel hormonal, sino que la actividad sexual implica una cierta cantidad de movimientos y de esfuerzo, que puede repercutir posteriormente en que las personas se sienten cansadas o pierdan parte de su potencia.
En ese orden de ideas, para no repercutir en el rendimiento deportivo, la sugerencia es que el día anterior sí se pueden sostener relaciones sexuales, pero evitando que sean demasiado exigentes a nivel físico, así que para los entusiastas de diversificar o explorar posiciones complejas, lo van a tener que postergar para otro momento.
Finalmente, no hay que desconocer que la actividad sexual puede repercutir a nivel mental en el atleta, así que también puede ser un beneficio en este sentido para estimular en un sentido psíquico a la persona.